¡Buenos días!
Hoy os propongo una nueva actividad muy interesante para trabajar la grafomotricidad con los peques.
La grafomotricidad es de suma importancia en estas edades ya que les ayuda a mejorar sus movimientos de la mano, la coordinación óculo-manual, la correcta sujeción del lápiz, el control motor y por tanto, la mejora de la precisión y calidad en sus trazados.
En este sentido, se considera necesario como paso previo a la escritura, ya que esta supone un esfuerzo y un trazado tan preciso que requiere de un desarrollo óptimo de su control motor.
De este modo, os propongo realizar juegos de laberintos en bucle en el que los peques repasarán el trazado con un rotulador o pintura siguiendo la direccionalidad correcta.
Es muy importante que sigan el sentido de manera adecuada y que no levanten el rotulador o pintura en la medida de lo posible hasta que no lleguen al final del recorrido.
Los bucles en esta etapa son esenciales como paso previo a la escritura de determinadas consonantes.
Si no tenéis impresora, no importa. Dibujarlos en un folio o cuaderno que tengáis en casa y que ell@s los repasen por encima. Lo importante es que trabajen ese movimiento y logren controlarlo con precisión.
Aquí tenéis alguna ficha de este tiempo por si os ayuda.
Feliz miércoles
Tamara
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